Hola amigos:Hoy se me dio por charlar y estaba pensando en cómo se van tejiendo y destejiendo las relaciones entre las personas y cómo por distintas circunstancias, pensando quizás más en el "uno" que en el "otro", se producen chispacitos inoportunos para mi gusto.
El otro día mientras esperaba el 41, a la vuelta de La Rural para ir hasta la casa de Mariú, detecté en la parada unos cartelitos muy prolijos, con flores artificiales pequeñitas y pegados con "scotch" a los parantes del refugio para que sean retirados sin romperlos y asía conservarlos y leerlos.
Muy a lo Osho o a lo Louise L. Hay pero no menos valioso por el trabajo que se tomó esta persona para hacer llegar un buen mensaje a quien quiera, ya que en el dorso de los papelitos dice; "Prueba con amor" o "No lo olvides con amor".
Yo me quedé con dos al azar (se acercaba gente y no quería que me vieran tomando todos) y en uno se lee: "El amaos los unos a los otros comienza con tí mismo", y el otro "El motivo de tu vida es tu vida".
La peor violencia que puede darse es la que el ser vivo ejerce sobre sí mismo. Y, sobre los otros también, verbal o fisicamente. En ocasiones sin querer, alguna palabrita hiriente o irónica -sin la inteligencia del contrapunto tan enriquecedor entre quienes se comunican- puede alterar la armonía. En este punto, es buena la síntesis que significa el contenido del libro "Los pilares de la tierra" de Ken Follett.
Nosotros todos podemos reflexionar y opinar sobre ésto porque en las sociedades actuales es tan enorme y variada la hondanada de estímulos que nos llegan que verdaderamente hay que tener un espíritu muy fuerte y estar muy seguros de nosotros mismos y de nuestros afectos para poder procesarlos y soportarlos. La tolerancia es primordial para no agregar más agresiones a que nos "impone" el rítmo de lo cotidiano.
Cariñosamente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario